Ofrecer oración
Divino Corazón de Jesús,
te ofrezco a través
del Inmaculado Corazón
de María,
Madre de la iglesia,
en unión con el Sacrificio
eucarístico,
oraciones y acciones,
las alegrías y los sufrimientos
de este día:
en reparación de los pecados, para la salvación
de todos los hombres,
en gracia
del Espíritu Santo,
para gloria del divino Padre.
Amén.
Intención general
«Para que se impulsen en la sociedad iniciativas que defiendan y fortalezcan el papel de la familia»
Intención misionera
«Que María, Reina del mundo y Estrella de la evangelización, acompañe a todos los misioneros en el anuncio de su Hijo Jesús»
Intención de los obispos
«Los educadores deben proponer con valentía a los jóvenes el camino angosto del seguimiento del Señor Jesús con el don de toda su vida en el sacerdocio y la vida consagrada»
Intención de la Pía Unión
«Oración desde la cárcel»
Señor crucificado, míranos
Somos personas como tú. Condenado. En la horca y tras las rejas de la vergüenza. Incluso a la espera de ser ejecutado, por veneno, por soga al cuello, por fusilamiento o en silla eléctrica. Esto te basta: como Tú, clavado en la cruz. A diferencia de ustedes, nosotros somos más a menudo culpables, incluso si no faltan personas inocentes entre nosotros.
Amigo, si supieras el inmenso misterio de la detención, ¡dónde estoy! Si viera y oyera lo que veo dentro de estos muros oscuros. Y pienso con amargura en mis seres queridos. Que sufren injustamente por mi culpa.
Un convicto en prisión
“Conozco el diablo que había dentro de mí, estaba vinculado al Mal. Pero desde que encontré al Señor ya no he cometido ningún acto de violencia: ¡en estos 14 años de condena a muerte Jesús, con su perdón, ha entrado en mi corazón! Si tienes que matarme, hazlo sólo por la brutalidad de mi crimen, porque ahora he cambiado...
Los amo, espero que mi muerte les dé paz, una vez más pido perdón a las familias que he afectado, ahora voy al encuentro de Jesús, los espero a todos en el Cielo, Él ya me ha preparado un lugar".