El pasado 19 de marzo reabrió de forma extraordinaria la iglesia de San Giuseppe dei Falegnami en el Foro Romano, cuyo techo se había derrumbado inesperadamente el 30 de agosto de 2018, afortunadamente sin causar heridos ni víctimas. El acontecimiento causó mucho pesar y aprensión, especialmente entre los admiradores de la iglesia situada encima de la prisión mamertina, un lugar de particular interés histórico y religioso en el Foro Romano.
Las crónicas narran que en aquellas lúgubres cárceles encontraron la muerte enemigos de Roma como Vercingétorix y los asociados de la conspiración de Catilina, así como la figura más importante de las primeras crónicas cristianas durante el Imperio: el apóstol Pedro, quien fue encerrado. allí arriba y que milagrosamente habría hecho brotar un manantial del fondo de la celda para bautizar a sus carceleros.
El Vicariato de Roma comenzó inmediatamente a proteger la iglesia y a restaurar la nave derrumbada: se trataba de un hermoso artesonado de madera, decorado en el siglo XVII por Giovanni Battista Montano, con una imagen de la Natividad. La imagen mostraba a Jesús en el centro, María a la izquierda arrodillada frente al Niño y José protegiendo la escena al fondo.